LG Electronics anunció su salida del mercado de cargadores para vehículos eléctricos (VE) y el cierre de su subsidiaria dedicada, HiEV Charger.
La decisión responde a lo que la empresa define como cambios estructurales en el entorno empresarial, incluyendo una desaceleración prolongada en la demanda y una competencia de precios cada vez más intensa.
Según medios surcoreanos, todos los empleados de HiEV Charger serán reubicados en otras divisiones de LG. La compañía, sin embargo, aseguró que continuará ofreciendo servicios de mantenimiento a sus clientes sin interrupciones.
LG ingresó al sector en 2022 mediante la adquisición de la firma AppleMango, rebautizada como HiEV Charger, tras haber iniciado actividades de investigación y desarrollo en 2018.
Desde entonces, desarrolló una oferta de productos que incluía cargadores de corriente alterna (AC) y soluciones de corriente continua (DC), incluyendo opciones de alta potencia.
En 2023, HiEV lanzó sus primeros modelos comerciales y centró sus operaciones en el mercado surcoreano.
En enero de 2024, expandió su presencia internacional con la apertura de una planta de producción en Texas, Estados Unidos.
A pesar de estas iniciativas, el negocio no logró cumplir con las proyecciones establecidas por la compañía.
En 2024, HiEV Charger generó ingresos por 10.600 millones de wones (aproximadamente 7,2 millones de euros), pero registró una pérdida operativa de 7.200 millones de wones. Según se indica, la filial recibió un dictamen de auditoría con salvedades debido a déficits consecutivos.
El CEO de LG Electronics, Cho Joo-wan, había señalado previamente al negocio de carga para VE como un eje clave de crecimiento dentro del objetivo corporativo de alcanzar ingresos por 100 billones de wones (unos 70.000 millones de dólares) para 2030.
Sin embargo, la compañía ha decidido redirigir su enfoque hacia segmentos con mayor estabilidad y rentabilidad.
En ese sentido, LG priorizará su División de Soluciones Energéticas (ES), especializada en sistemas de climatización, refrigeración y bombas de calor, tanto para el ámbito residencial como comercial.
La estrategia incluye también soluciones de enfriamiento para centros de datos, un sector en expansión.
