La Comunidad de Madrid ha solicitado al Ejecutivo central un incremento en la dotación económica del Plan Moves, tras haber distribuido prácticamente la totalidad de los 57 millones de euros recibidos en la última partida.
El programa, destinado a impulsar la movilidad eléctrica mediante subvenciones para la adquisición de vehículos electrificados y la instalación de puntos de recarga, ha registrado un elevado nivel de solicitudes.
En declaraciones a los medios durante un acto en Majadahonda, un consejero madrileño destacó que la gestión regional del plan “está siendo muy ágil” y que la comunidad lidera las matriculaciones de vehículos eléctricos a nivel nacional.
Subrayó que existe un gran interés por parte de los ciudadanos en realizar la transición hacia este tipo de movilidad, pero que la capacidad presupuestaria actual resulta insuficiente para cubrir toda la demanda.
Según explicó, Madrid ha recibido un total de 240 millones de euros desde el lanzamiento del programa, de los cuales 57 millones llegaron en la última asignación
Estos fondos “ya están prácticamente distribuidos entre todos los solicitantes”.
Ante esta situación, el Ejecutivo autonómico insta al Gobierno central a aumentar los recursos si quiere impulsar con decisión la transición energética y la transformación del modelo de movilidad.
El Plan Moves III, vigente en la actualidad, contempla ayudas directas para la compra de turismos, furgonetas y motocicletas eléctricas, así como para la instalación de infraestructuras de recarga. Los importes varían en función del tipo de vehículo y de si el beneficiario entrega uno antiguo para achatarrar.
Sin embargo, distintas asociaciones sectoriales y administraciones autonómicas han advertido que la cuantía asignada se agota rápidamente, lo que deja a muchos solicitantes en lista de espera.
En el caso de Madrid, la alta demanda se ha visto reforzada por un proceso de tramitación que, según el consejero, “ha permitido que las ayudas lleguen al ciudadano con rapidez”. No obstante, subrayó que el éxito de gestión no compensa la limitación de fondos y que es necesario un refuerzo urgente para mantener el ritmo de matriculación y el interés de los consumidores.
El responsable autonómico insistió en que la transición hacia un transporte más sostenible requiere estabilidad y previsión presupuestaria. Añadió que la electrificación es un componente clave en los objetivos de reducción de emisiones, pero que solo será efectiva si las administraciones coordinan esfuerzos para garantizar que las ayudas se mantengan y se adapten a la demanda real.